Como si fuéramos tan güevones...

Por: Alejandra Zapata

- ... ¿yo?... yo no estaba respirando por la herida, ni le estaba siguiendo la corriente a una “manada de pirobos sublevados” como ustedes nos llaman; yo estaba luchando por lo mío, por lo que me pertenece y por lo que este gobierno marica me quiere arrebatar con estúpidas leyes... como si fuéramos tan güevones... y no es sino salir a reclamar para que aparezcan estos hijueputas.

- Usted se calla que aquí nadie quiere su opinión, estamos hasta las güevas de gente tan piroba como usted. Más bien díganos a qué entidad pertenece.

- No pues si, que chimba... una entidad jjmm… y eso para qué si solamente queremos lo de nosotros; la educación, la puta educación que nos quieren negar. Es más, mire yo le cuento: hoy yo me levanté normal, me fumé un porro como siempre, caminé a la universidad por la misma puta calle de siempre, saludé a las gonorreas que siempre me saludan y que no conozco, recibí mis clases normal y escuché un peto que resonó en toda la universidad. Yo no sé como no cogieron a ese loco, pero mejor porque todos salimos a enfrentar a los hijueputas tombos que nos llevan la mala; un montón de maricas que no hacen nada bueno.

Malparida la hora en que quise desertar por el puto cansancio porque aquí me tienen como un hijueputa perro sin poder llamar.