jueves, 2 de julio de 2009

Inconsciente


Nunca me había enfrentado a alguien tan fuerte, la pelea se prolongó por más tiempo de lo normal y en esa ocasión terminé más lastimado que nunca. Los poderes de mi contrincante eran fabulosos, golpeaban con demasiada fuerza y herían sin medida, además, mis súper poderes parecían ser inservibles con él.

Decidí atacarlo con velocidad golpeando partes vitales de su cuerpo y sólo pude moverlo unos cuantos centímetros, su mirada se clavó en mí y, en microsegundos, respondió a mi ataque con tanta energía que mi cuerpo se dolió por completo y cuando intenté reaccionar estaba de nuevo encima de mí golpeándome.

No podía creer que había alguien con mejores habilidades y mayor fuerza que yo y decidí enviarle un ataque especial que lo venciera de una vez por todas y, con mis manos lancé contra su cuerpo la recarga de energía que había logrado concentrar. Pasaron unos cuantos segundos y el, aún suspendido en el aire, se sonrió, sacudió sus manos y sin pensarlo volvió a atacarme, está vez fue su ataque mayor, lo supe por el dolor que sentí, tan fuerte fue que perdí al instante el conocimiento.

Después de ese súper ataque no había dolor, no había ruido, no había luz, sólo inconsciencia. Estaba en la nada absoluta.

Cuando logré despertar, tomé el reloj en mis manos y me di cuanta de que me había cogido la tarde para ir a trabajar.

2 comentarios:

Tatiana dijo...

jajajajajajajajajajja, que cuento mas encarratador,me montó en mera nube, y que caida me pegué con ese final,jajajajaja, super chistoso, está muy chevere victor, esa imaginación tuya,jajaja, te felicito de nuevo...

Catalina Yepes L dijo...

Definitivamente tus historias son muy buenas esta esta muy charra y ese final inesperado... Congratulations.